Feria

Y Sí....Ya sé que la de Sevilla ya se ha pasado. Yo hablo de la Feria de mi querida Constantina...que bueno...algunos de ustedes no tendrá ni pajolera idea de donde está ese sitio...o si existe.

Pero en fin, a lo que iba. No digo que no me guste ir al pueblo...no (Aunque es un soberano aburrimiento). Lo que digo es que me voy a pasar una semana entera sola en un pueblo de la Sierra donde el ocio está en decadencia (si no estaba ya en las profundidades del mar) y junto a las mismas personas de siempre...Mi Familia.

Y bueno, no es que no les quiera...es que no me divierto sentada en una caseta escuchando a mis parientes masculinos bociferar lo machos que son y lo bien que les va la vida o a mis parientes femeninas hablando sobre lo cafres que son los hombres y lo poco que hacen para tanto hablar de logros.

Y bueno, luego está la otra parte. La feria en sí misma.

Esta...Bueno...Es que es una feria de pueblo. Así que podemos encontrar lo de siempre:

- Tira pichones con las escopetas torcidas.

- Cueva del Terror (Un puñetero tren en el que sólo giras, te dan globos y te puedes ver reluciente si llevas colores claros dentro de los 2 escasos metros de oscuridad)

- El tren de la bruja (Lo mismo que el anterior sólo que en este si no mides medio metro el payaso no es tan simpático)

- Canguro-Octopus-Betty Boo...En fin, cualquier aparato en el que tres personas giran y botan sin parar mientras el hombre de la cabina se pelea mediante altavoces con:

- La olla : si...esa cosa que más que olla parece una sarten preparando un salteado de chonis y killos cuyo único propósito es ligar con alguien. ¿Cómo? pues por medio de empujones o espachurrones varios contra el limitado suelo. Y bueno, entre estos dos últimos existe una incansable guerra por medio de Chunda-Chundas.

- El Barco : Bueno, este si me gusta, aunque sólo por las jaulas...me encanta volar un poquito...aunque siempre haya algún inepto/a que te pise al bajar.

Y por último y más esperado:

- ¡ Los coches Locos ! : A ver...Como explicarlo...Definiremos los coches locos como el mundo animal feriante...Ese estado irracional en el que machos y hembras exponen sus plumajes y sus cantos a la espera de que alguna presa caiga en sus fauces.

Por un lado, podemos ver a los Críos, niños de entre 7 y 13 años que se gastan todo su dinero en fichas, si no se las gastaron antes en el tira-pichón para conseguir los mismos llaveros de siempre. Estos pobres ilusos, se compran fichas a rabiar sin nunca percatarse de que, bueno... ¿En serio te crees que los mayores te va a dejar Vivir? Porque la verdad... Tú con 10 años no te atreves a quitarle el coche a un Cani de metro noventa...¿O sí?

Después nos encontramos a las Chicas (O luces de Neón según el día): Tan pintadas y con tacones de más de 15 centímetros. Estas, al contrario que las féminas de la ciudad, se pasan la feria sentadas en los coches locos. Tanto en el asiento del copiloto como en los alrededores, a la espera de que otro chico las suba en su "Buga descapotable".

Y por último, tenemos a los Machos Cabrios de Sierra. Estos que a las 3 de la mañana llevan gafas de sol y una muñeca hinchable...uy perdón...una chica o novia bajo el brazo. Estos, que frecuentan un estilo de Cani color rosa y joyería dorada. Se pasan la noche conduciendo con un sólo brazo (No vaya a ser que se me descarrile el coche) y mirando de forma altiva (Que no queriendo, pero es que de noche con las gafas de sol se ve más bien poco).

Y poco más hay que añadir...Suelen moverse en manadas de entre 3 y 6 camicaces y viajan siempre con un vaso de tubo vacío...el por qué...la supervivencia.

Y aquí termina mi pequeña explicación sobre mi forma de ver la Feria...Y si os entra la curiosidad y os pasáis por mi pueblo en feria. Buscadme. Suelo encontrarme delante de una buena película en el salón de mi piso escuchando desde la lejanía El Regue mal pinchado de algunas casetas.